jueves, 23 de febrero de 2012

Omara Portuondo complace a Holguín


Omara echó su pasito.
La diva cubana Omara Portuondo satisfizo las expectativas del público holguinero en el teatro Suñol, lleno total, con un concierto dedicado a las familias Cuayo, Oramas y Márquez, importantes en el panorama musical de esta ciudad. 
Andres Cuayo e Irma Oramas
La Portuondo recibió la réplica del Hacha de Holguín, máximo símbolo de la provincia y la réplica del Aldabón de la Periquera, símbolo de la Ciudad Cubana de los Parques mientras que el compositor y pianista Joel Rodríguez Milord, presidente de la Sección de Música de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac) en la provincia de Holguín, le obsequió un cuadro del talentoso holguinero Víctor Manuel Velásquez, el doctor que pinta.
Omara recibe de Vivian Rodriguez, presidenta del gobierno en Holguín, el Hacha de Holguín.

Momentos en que recibe el Aldabónde la Ciudad.

Lucrecia Marín la acompañó en “Veinte años”, de María Teresa Vera.
Omara interpretó “Tal vez”, de Juan Formell; “La era está pariendo un corazón”, “Gracias”, tema que da nombre a su ultimo disco; “Drume negrita”, “Dos gardenias”, “Adiós felicidad”, “Lo que me queda por vivir”, “Tres palabras” y “La sitiera.”
En Drume negrito.

El sssshhhh! de Drume negrito


miércoles, 22 de febrero de 2012

Omara Portuondo, la Novia del Feeling, actúa esta noche

Por Amauris Betancourt.
Omara Portuondo, la Novia del Feeling.
La cubanísima cantante Omara Portuondo, miembro del Buena Vista Social Club, ofrecerá un concierto esta noche en el teatro Eddy Suñol de la ciudad de Holguín como parte de su gira nacional.
La cantante local Lucrecia Marín (Luma), le acompañará en el escenario en algunos de sus números. Omara recuerda con mucho  agrado y orgullo al cantante y compositor holguinero Juanito  Márquez de quien interpretará algunas piezas.
Periodista holguineros durante la entrevista.
Omara Portuondo llega a Holguín tras sus actuaciones en Guantánamo, Santiago de Cuba y Granma.

viernes, 3 de febrero de 2012

Sara González, voz inolvidable


Sara González en su último concierto en la ciudad de Holguín, el 13 de junio de 2009.
Texto y fotos Amauris Betancourt.
Mi primer encuentro con Sara sucedió hace casi 15 años, durante mis días de estudiante universitario. Fui al concierto por embullo de amigos. Había oído hablar de ella –Cuba entera la conocía entonces–  pero su música no me gustaba, pensaba yo. Hacía un concierto muy cerca, en el edificio 18 plantas de nuestra ciudad de Holguín, a menos de un kilómetro de la universidad. Quizás eran días de Romerías de Mayo –no lo recuerdo bien-  y había actuado antes Ángel Quintero.
Su voz y mirada me impresionaron sobremanera. Su voz, potente y firme, me estremeció; su mirada, elocuente, diáfana y pura, me fortaleció sin espacios a dudas. La voz de Sara afianzó mi amor por los míos y Cuba. Y el público, mayormente jóvenes, la aplaudía fuertemente en gesto de agradecimiento, por el disfrute de escucharla en vivo.
Sara volvió a Holguín 12 años después. La acompañaban Heidy Igualada y Martha Campos. Realizaba una gira nacional y actuó en el cine-teatro Ismaelillo. Y Sara era la misma, desenfada y carismática; convencida, profesional. Y compartió sus planes con nosotros. Estaba contenta de regresar a Holguín. 
Concierto de Sara González con las invitadas Marta Campo y Heidy Igualada como parte de su gira nacional en el cine-teatro Ismaelillo de la ciudad de Holguín, el 13 de junio de 2009.
La música y vida legadas nos hace sentir orgullo. Saberla nuestra, siempre presente, representa un honor. Y Sara González, consecuente hasta la muerte, se entregó al pueblo al que le cantó, en eso gesto extraordinario de esparcir las cenizas al mar, frente a las aguas de la capital de todos los cubanos. La pone donde siempre se sintió bien: al lado de su querido pueblo, que no solo es Cuba, sino todos aquellos ansiosos de libertad en otros lares del mundo.