lunes, 1 de diciembre de 2008

El ajedrez cubano gana prestigio

Por Amauris Betancourt.
La práctica del ajedrez en Cuba tiene la historia de genial Capablanca como punto de referencia. Su título de Gran Maestro, el primero de la Isla, alcanzó su pináculo con su reinado en el ajedrez mundial a principios de siglo. No fue hasta el triunfo de la Revolución cubana, en 1959, que se crearon las condiciones para fomentar este deporte. Ahora vive época de auge y gana adeptos en tiempos donde existen, tanto en hombres como en mujeres, la mayor cantidad de pergaminos en títulos reconocidos internacionalmente.
Último nacional femenino de ajedrez.
La actuación del ajedrez cubano en la pasada olimpiada mundial en Dresde pudo ser mejor según reconocen los expertos de la prensa si bien algunos medios la calificaban de buena. El interés por este deporte crece según el creciente número de seguidores en el rastreo informativo del desempeño de ambos equipos a través de los mass media.

Leinier Domínguez no perdió y Lázaro Bruzón parece despertar de un letargo preocupante; sin embargo, el average ELO descendió en ambos. Las mujeres hicieron más noticias, Lisandro Ordaz y Oleini Linares de manera positiva.

Las buenas nuevas del deporte de las 64 casillas en el femenino tuvieron protagonismo primero que todo, en la MI Oleiny Linares (2262). La santiaguera se adjudicó la plata en el cuarto tablero con 9 puntos de 10 posibles, solo aventajada por la polaca Joana Madjan (2284). Oleiny jugó para un ELO promedio de 2530, muy por encima de su promedio actual. Su fama, del juego duro, transciende. Añadió 41 puntos a su ELO.
La MI Lisandra Ordaz (2306) clasificó entre las destacadas detrás del segundo tablero y causó buena impresión. Tanto ella como la oriental Linares marcaron la diferencia en el equipo cubano y resultaron las más productivas en la lid de Dresde, Alemania 2008. Si embargo la GM Maritza Arribas (2303), actual campeona nacional, no consiguió su acostumbrado nivel de juego y no aportó los puntos necesarios para una mejor ubicación final del equipo. Queda la otra GM Sulennis Piña (2286), quien, tercer tablero por medio, rubricó un pobre servicio y su puntuación ELO mermó. Los 3,5 puntos en 8 presentaciones representaron poco para Cuba. Yaniet Marrero tampoco aportó mucho a la posición de las cubanas y restó más bien 16,5 puntos a su actual ELO. Aún así al ajedrez de la Isla lidera el área latinoamericana con puesto menor al de sus posibilidades pero el futuro ha de centrarse en ese necesario fogueo internacional para hacer costumbre y poder rendir mucho más a escala internacional.

1 comentario:

  1. Indudablemte faltó la notable experiencia y sabiduría de la WGF Vivian Ramón. El ajedrez olímpico cubano la extrañó

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